Todos los amigos juntos
–¡Ah! No son para mí –dijo Jen, con una risita, al leer la tarjeta, y luego me extendió el ramo–. Cat, son para ti. –¿Para mí? –pregunté, atónita. –Vaya –exclamó Becca–. ¿De quién son? Habrán costado una fortuna. Tomé la tarjeta de las manos de Jen y la leí: "Para Cat. Es la primera vez que compro flores para una chica. Rosas blancas para decir que te considero especial. Que pases muchos momentos felices en tu nuevo hogar. Cariños, Jamie." Todo está a punto de cambiar para Cat. Se está mudando, de modo que al fin tendrá una habitación propia, y su papá se...