El proceso de globalización económica, con todas las dinámicas que ha generado, se ha constituido en un dinamizador de la actividad turística. La mayor facilidad en las comunicaciones, la agilización de los medios de transporte y el creciente flujo de intercambios económicos se han convertido en facilitadores que permiten agilizar las reservas, multiplicar los desplazamientos y diversificar los motivos de viaje, los destinos y las modalidades de recreación. Poner de relieve esa evolución renovada del turismo es uno de los grandes aportes de la obra del profesor Meyer, que hoy...