Te amo
Te amo: "Se diría que estaba celebrándose un consejo de familia. Pero no ocurría así. Pedro Martínez amonestaba a su hijo, y éste hundido en un sofá, le escuchaba filosóficamente. No lejos de él la madre refunfuñaba, aprobando lo que decía su esposo. Al otro extremo del salón, Pilar, la hermana del amonestado, se pulía las uñas tranquilamente, sin reparar, al parecer, en la discusión que tenía lugar entre sus padres y su hermano. Don Pedro Martínez era un señor grueso, de rubicundo rostro, ojos ratoniles y nariz prominente. Vestía deportivamente, si bien se notaba en él al ...