Mao Zedong, nacido el 26 de diciembre de 1893 en Shaoshan, provincia de Hunan, y fallecido el 9 de septiembre de 1976 en Pekín, fue un destacado líder político y filósofo chino. Es conocido principalmente como el fundador de la República Popular China y por ser el líder del Partido Comunista Chino (PCCh) desde su creación hasta su muerte. Mao dejó una profunda huella en la historia de China y en el comunismo global, siendo una figura controvertida que provocó tanto admiración como críticas.
Desde joven, Mao mostró un interés significativo por la lectura y los estudios. Ingresó a la escuela primaria en 1906 y, posteriormente, se trasladó a Changsha para continuar su educación. En su juventud, fue influenciado por la Revolución de Xinhai de 1911, que derrocó a la dinastía Qing. Esta convulsión política lo llevó a unirse al movimiento estudiantil y a explorar diversas ideologías, incluida la política liberal y el socialismo. En 1918, se graduó de la Universidad de Hunan, donde comenzó a involucrarse en el movimiento obrero y a participar en la fundación de organizaciones comunistas.
En 1921, Mao se convirtió en uno de los miembros fundadores del Partido Comunista Chino. A partir de 1927, tras un levantamiento fallido contra el gobierno del Kuomintang, Mao adoptó la estrategia de la guerrilla rural como medio para propagar la revolución comunista en China. Durante la década de 1930, Mao consolidó su poder dentro del partido y desarrolló su ideología política, que más tarde sería conocida como el maoísmo.
Uno de los eventos más significativos en la vida de Mao fue la Longa Marcha (1934-1935), un esfuerzo épico del Ejército Rojo para escapar de las fuerzas del Kuomintang. Esta marcha, que abarcó más de 9,000 kilómetros, se convirtió en un símbolo de la resistencia y determinación comunista, estableciendo a Mao como el líder indiscutible del PCCh. Durante este período, Mao y sus tropas enfrentaron numerosas adversidades, pero su capacidad para superar obstáculos contribuyó a cimentar su figura como líder carismático.
La Segunda Guerra Mundial fue otro punto clave en su carrera. Mientras Japón ocupaba vastas áreas de China, Mao promovió la lucha antiimperialista, aliándose estratégicamente con el Kuomintang en ciertas ocasiones, aunque este vínculo fue tenso y complicado. Tras la victoria sobre Japón en 1945, estalló una guerra civil entre el PCCh y el Kuomintang, que culminó en la victoria comunista en 1949. El 1 de octubre de ese año, Mao proclamó la formación de la República Popular China desde la Plaza Tiananmen, un evento que marcó el inicio de una nueva era en el país.
Como líder del nuevo estado, Mao implementó una serie de reformas económicas y sociales, algunas de las cuales fueron muy controvertidas. El Gran Salto Adelante (1958-1962) fue una de sus políticas más audaces, diseñada para transformar rápidamente a China de una economía agraria a una economía socialista industrializada. Sin embargo, esta campaña resultó en una hambruna devastadora que causó la muerte de decenas de millones de personas.
Otro evento notable fue la Revolución Cultural (1966-1976), un movimiento sociopolítico que buscaba reafirmar la ideología comunista y eliminar elementos considerados burgueses en la sociedad china. Este periodo se caracterizó por la persecución de intelectuales, la destrucción de patrimonio cultural y una intensa lucha de poder dentro del Partido Comunista. La Revolución Cultural causó un gran sufrimiento humano y socioeconómico, dejando cicatrices profundas en la sociedad china.
Pese a los fracasos y las tragedias, Mao Zedong sigue siendo un ícono en la historia del comunismo y de China. Su figura polariza a la opinión pública: mientras algunos lo ven como un líder visionario que luchó por la independencia de China y la mejora de las condiciones de vida de las masas, otros lo critican por los métodos draconianos que empleó y las catastróficas consecuencias de sus políticas.
El legado de Mao es innegable; su influencia se extiende más allá de las fronteras de China, afectando el desarrollo de movimientos revolucionarios y socialistas alrededor del mundo. Mao Zedong falleció el 9 de septiembre de 1976, pero su figura y su ideología continúan siendo objeto de estudio y debate, invitando a reflexionar sobre el complejo panorama del siglo XX y las luchas por el poder y la justicia social.