Gente con clase

Un libro para sacarle todo el provecho al sirimiri y a la chuleta de kilo trescientos. Todos nacemos vascos no es un libro de chistes sobre bilbaínos. Todos nacemos vascos tampoco son los sketches del programa de televisión Vaya Semanita que el espectador tantas veces ha visto en los zápines. Dentro de Todos nacemos vascos ni tan siquiera se esconde un libro de recetas de cocina vasca, ni mucho menos una tesina sobre el nacionalismo. Es mucho menos que todo eso. Es simplemente la demostración fehaciente de que todos, también usted, somos vascos o los fuimos en algún tiempo: ¿Folla...

Los mejores amigos Jack y Yani hacen todo juntos. Después de la fiesta de cumpleaños número treinta de Yani, ella decide dejar la ciudad en unas vacaciones espontáneas para visitar todos los lugares de las novelas de ficción para adultos que ama, esperando que cuando regrese, habrá enterrado la llama secreta que siente por Jack. Forzado por sus amigos a ir en un viaje en carretera para perseguir a Yani, Jack descubre mucho acerca de su mejor amiga leyendo las novelas con las que ella ha estado obsesionada. Desde la caza de vampiros en Forks hasta la búsqueda de magos en Florida, Jack...

Las leyendas urbanas son esas historias extravagantes que pasan de bocaen boca como si fueran verdades indiscutibles. Una selección de sucesos asombrosos que va desde el increíble caso de unos pechos de silicona queestallaron a 15.000 pies de altura o el extraño hallazgo de un buzo colgado de un árbol. Un libro que es ya todo un clásico.

Invertimos, destinamos, perdemos, gastamos y malgastamos la mayor parte de nuestra vida intentando que los demás nos quieran.Sin embargo, la línea que existe entre que te quieran como eres y comportarse para que te quieran como quieres que te quieran..., pues, en fin, que es un lío y acabas siendo un desgraciado/a. Por eso, en este libro encontrarás de manera muy clara qué tienes que hacer para comportarte como nadie quiere que lo hagas. Ten en cuenta que cuando termines de leerlo tal vez te quieran un poco menos, pero no me odies por eso porque j#@∞r..., ¡qué feliz vas a ser!