Historias de almas perdidas: Loreley

Un combate de boxeo, una pequeña aldea gallega, unos tertulianos que comentan la vida de un niño y un relato en que la miseria y la pérdida dejarán unas cicatrices eternas. En el mítico Madison Square Garden se disputa el combate por el título mundial de peso ligero, el terrible Ñato ?Pólvora? Herrera, un púgil de pegada criminal, se enfrenta con Bruno Broa, un boxeador elegante y delicado, comprometido con las clases desfavorecidas y que lee poesía en los descansos de los entrenamientos. El combate sirve de contrapunto en Aquel diluvio de otoño a la historia de Orestes Lagoa, un...

Niemand kommt, um mich zu retten. Ich bin jetzt seine Fiore, seine Blume. Mit der er verfahren kann, wie er wünscht. Und er will alles. Monster will meine Tränen, meine Lustschreie, meine Angstschauder. Im Gegenzug verschafft er mir auch diese moment erschreckender Klarheit. Ich weiß, wer ich zu sein glaube. Ich weiß, wer ich ihm zufolge bin. Ich habe das Gefühl, dass ich mich irgendwo dazwischen befinde, verloren in einem Ozean aus Schmerz. Als er mir meinen Bruder mit einem breiten Lächeln vor die Nase setzt, bin ich gezwungen, zwischen ihnen zu wählen. Es ist eine simple Wahl: die...

Junie está a punto de empezar un nuevo curso. Deberá acostumbrarse a su nueva clase, a su nuevo profesor... ¡y a un montón de niños y niñas que son unos perfectos desconocidos. Aunque eso no es lo peor... Lo peor es que, cuando Junie B. intenta leer lo que pone en la pizarra, no ve lo mismo que los demás. ¿Será que tiene que llevar... gafas?

Lo sabía: "—Eso es. Se trataba de un hombre anónimo, dedicado al teatro, según creo. Un muchacho ambicioso que creyó hacer buena fortuna enamorando a la joven heredera. Lord Lawson lo supo, la desheredó, la echó de casa y por ahí se fueron la aristócrata y el aventurero bohemio. Megan y Lily estaban inclinadas hacia su padre y no perdían detalle. Cuando el caballero hizo alto, sin que Rex le detuviera, ambas jóvenes exclamaron: —¿Qué ocurrió después, papá? —¡Yo qué sé! —se encogió de hombros—. Se fueron de Londres. Un día se supo que ella había muerto, y que...