Perla en Brasil (Colección Perla)

Wendy Harmer es una reconocida escritora, comediante y presentadora de televisión australiana, nacida el 23 de diciembre de 1961 en Wagga Wagga, Nueva Gales del Sur, Australia. Desde sus inicios en el mundo del entretenimiento, Harmer ha sido un talento polifacético que ha dejado una huella indeleble en los medios de comunicación y en la literatura.

Tras completar su educación secundaria, Wendy se trasladó a Sídney para asistir a la Universidad de Nueva Gales del Sur, donde estudió comunicación. Su carrera comenzó en la radio, donde trabajó en diversas estaciones como 2Day FM y 2BL. En 1989, Harmer se unió al programa de televisión "The Midday Show", lo que la catapultó a la fama. Su estilo distintivo y su habilidad para conectar con la audiencia le ganaron un lugar como una de las presentadoras más queridas de Australia.

En la década de 1990, Wendy Harmer se diversificó en su carrera al convertirse en una destacada escritora. Publicó numerosos libros, tanto de ficción como de no ficción, que han sido bien recibidos por el público y la crítica. Su obra más notable es "The Account of My Life", donde comparte experiencias personales y reflexiones sobre su vida y carrera. Además, ha escrito varios libros para niños, mostrando su habilidad para contar historias que resuenan con audiencias jóvenes.

La influencia de Harmer en el ámbito literario y mediático ha sido significativa. A lo largo de su carrera, ha recibido múltiples premios por su trabajo, incluyendo el Logie Award y el Australian Commercial Radio Award. Su capacidad para abordar temas contemporáneos con humor y sensibilidad ha hecho de ella una voz relevante en la sociedad australiana.

Aparte de su trabajo en radio y televisión, Wendy Harmer ha sido una firme defensora de varias causas sociales. Ha utilizado su plataforma para abogar por la salud mental, los derechos de las mujeres y la educación infantil. Su compromiso con estas causas ha sido evidente en sus apariciones públicas y en sus escritos.

En los últimos años, Harmer ha continuado trabajando en proyectos creativos y ha expandido su alcance a través de las redes sociales, donde comparte sus pensamientos y experiencias con sus seguidores. Su autenticidad y humor la han convertido en una figura admirada y respetada en Australia.

En resumen, Wendy Harmer es un ejemplo de versatilidad y dedicación en el mundo del entretenimiento y la literatura. Con una carrera que abarca más de tres décadas, ha hecho contribuciones significativas a la cultura australiana, dejando un legado que sigue inspirando a nuevas generaciones de escritores y artistas.

¿Alguien tiene una nave espacial con la que pueda escapar a otro planeta? ¡Por favooooooooooor! ¿Qué voy a hacer? ¡Esto es PEOR QUE EL FIN DEL MUNDO! Durante tres meses he sido feliz porque: He ido a la playa. He dormido hasta las tantas. He visto telebasura hasta que mis neuronas han empezado a suicidarse. Y, sobre todo, porque no había clase. Esta mañana, a las 8:30 horas, he celebrado mentalmente un funeral en honor a porque: Ha empezado el instituto.

Un osito muy curioso tiene multitud de preguntas para el gran oso sabio. Únete a ellos para explorar juntos su mundo y descubrir todas las respuestas. Libro entrañable, un maravilloso texto escrito e ilustrado por dos artistas preciados.

Libro para niños: Un campamento de verano debe ser divertido, ¿verdad? AJ no está tan seguro, especialmente cuando nada más llegar, ve a su viejo enemigo: ¡Cedric! Por suerte, no estarán en la misma cabaña. Por desgracia, tendrán que competir el uno contra el otro en la competencia del campamento. Cedric empieza a jugarles "trucos sucios" al equipo de AJ. ¿Podrán AJ, Hawk y Mike desquitarse? ¿Quién ganará? Este es el segundo libro de la serie "Diario de un Chico Casi Genial". Recomendado para niños y niñas en busca de relatos divertidos.

La de Azafrán y Obituario ha sido una de las mejores ideas: establecer el Tribunal Supremo de Justicia Infantil, encargado de juzgar y sentenciar a los papás que cometan faltas contra los hijos; por ejemplo: obligarlos a leer, ponerles nombres raros, prometerles premios que no piensan darles y hasta hacerlos venir al mundo sin su consentimiento. Naturalmente, el tribunal se compone sólo de niños, aunque su jurisdicción se limite a las narraciones que hacen los dos amigos, a pedido de sus compañeros.