Debo Perdonar, Pero...

Una gran historia nunca contada antes: la de un chico que hablaba con Jesús, y que se atrevía a hacerle las preguntas más inocentes, a la vez que le cuestionaba sobre los temas que más han preocupado a la humanidad desde los orígenes del tiempo. Su nombre era Segatashya. Era un pastor, analfabeto, que provenía de una familia pagana de una de las zonas más remotas de Ruanda. Nunca fue al colegio, ni tuvo una Biblia en sus manos ni pisó una iglesia… Un día de verano de 1982, cuanto este chico de 15 años descansaba de su trabajo bajo la sombra de una acacia, Jesús le visitó y le...

Quienes hemos escrito en los últimos años acerca de la niñez desde la perspectiva teológica, reconocemos que mucho antes de nosotros(as) —y cuando casi ningún teólogo(a), ni biblista evangélico mencionaba el tema en América Latina y el Caribe—, ya Edesio Sánchez Cetina lo hacía combinando esas virtudes que pocos aúnan: sapiencia bíblica (es un reconocido traductor bíblico), hondura teológica (es un acreditado maestro de teología en decenas de instituciones teológicas) y sensibilidad pastoral (he disfrutado de su calidez pastoral en la iglesia local en San José, Costa...

Descubre 'Las Historias Más Hermosas de la Biblia', una selección exquisita de los relatos más cautivadores y significativos de las Escrituras. Este libro trae a la vida las historias que han sido pilares de fe y moral a lo largo de los siglos, desde la creación del mundo en el Génesis hasta las enseñanzas inspiradoras de Jesús. Cada narración es presentada con un lenguaje claro y conmovedor, perfecto para lectores de todas las edades. Además de revivir estos relatos ancestrales, el libro ofrece reflexiones profundas sobre los mensajes y enseñanzas que cada historia transmite. Ideal ...

Misericordia y perdn, es un libro con impactantes testimonios y relatos, que enaltecen el poder de la oracin y la fe, llevndonos a lugares dantescos y tambin celestiales; mostrndonos cmo se manifiesta sobrenaturalmente el poder y la gloria de Dios cuando nos volvemos a l y le aceptamos como seor de nuestras vidas; ofrecindole nuestros pecados, nuestro haber, poseer, y hacer; as como nuestro tiempo, espacio, forma y voluntad. Nos permite ver cmo, cuando las tinieblas espirituales son tocadas con el glorioso poder de Dios, las circunstancias ms adversas se transforman en motivo de alabanza y...