Debo Perdonar, Pero...

Los negocios del Padre no son como cualquier otro negocio. Sus negocios son la empresa que sobrepasa y excede a todas las demás. No hay comparación con otra, porque Su reino está en un plano diferente, un planeta diferente, un mundo diferente, un universo diferente. El Reino de Dios, del cual es parte todo creyente, sostiene un lugar en el tiempo y la historia e importancia de los que cualquier otro reino, pasado, presente, y/o futuro, carece en comparación. Como hijos de Dios, hemos interferido en Sus negocios. Un heredero hereda los activos y la riqueza de su padre, pero él también...

El autor presenta la tercera parte de las historias y situaciones relacionadas con el método de consulta a los Òrìsà mediante los caracoles. Esta vez nos acerca al conocimiento de los caminos de Osa, Ofun, Owonrin y Ejila Sebora, desde el punto de vista tradicional y de acuerdo con la narrativa original de los yorùbá de la nación Nagó, agregando además una breve interpretación sobre el problema para quien se está consultando.

Las prédicas contenidas en este libro fueron pronunciadas por el padre Kentenich a la comunidad de una parroquia a cargo en Milwaukee (conformada mayoritariamente por inmigrantes alemanes). En ellas queda de manifiesto la extraordinaria coherencia de su pedagogía mariana, que ya desde 1914 comenzaba a revelarse, y que siguen siendo de una enorme actualidad. Estas prédicas corresponden a una profundización del pensamiento mariano del padre Kentenich, pero, sobre todo, son el canto de gratitud de un hijo fiel que se supo siempre amado por María y por Ella, conducido hacia Dios.

After reading this powerful testimony of the Lord's real and tangible power, it will be impossible to look at our sons and daughters without blessing them, showing them the will of God for their lives and praying unceasingly for them. Billy Bumberg tells of the unconditional love of God and of his mother's constant faith and dependence on the promise that God had given her regarding her son's future. As the author says in the introduction: 'When God has chosen you and has a calling for your life, the devil works much harder against you than against anyone else.'