Nuestra isla

A Gustavo le han metido la idea de que el bicho de la oscuridad lo acecha. Así llegó el primer miedo. Luego vinieron los demás. De repente, fueron demasiados para Gustavo; sin embargo, sabía que en el fondo eran miedos que podría superar. Todos hemos tenido miedo, y está bien, pero cuando ese miedo nos paraliza, algo tenemos que hacer para vencerlo, como Gustavo.

El bosque se despierta con una mala noticia: ¡se acerca una gran tormenta! Todas las familias se hacen con provisiones y preparan sus casas para afrontar la tempestad en su cálido y seguro hogar. El frío viento sopla cada vez más fuerte. Preocupado, el zorrito se pregunta desde su madriguera si habrá alguien que se haya quedado fuera. Entonces, dos osos se acercan entre el temporal. Todos los observan. ¿Quiénes son? ¿Qué quieren? ¿Su comida? ¿Sus casas? Los osos piden refugio a las familias, pero ninguna está dispuesta a abrirles la puerta.

Miss Despistada es un poco olvidadiza. Tanto, que guarda la leche en el horno y cuando va a la ciudad a comprar carne acaba en el banco pidiendo salchichas. ¡Qué despiste!

Un hilarante recordatorio de cómo la tecnología nos puede llevar hacia atrás... ¡a la época de las cavernas! "Había una vez, hace mucho, mucho tiempo, o tal vez ayer... un niño que vivía en una cueva." La era tecnológica tiene muchos aspectos positivos, pero también un sinfín de consecuencias negativas, sobre todo para las nuevas generaciones. Una de estas consecuencias es que al tener una interacción excesiva con aparatos electrónicos, como tabletas, computadoras o teléfonos inteligentes, muchos niños y niñas dejan de relacionarse con su entorno. La realidad virtual poco a...